El miedo es el peor de todos los sentimientos. El miedo es un arma infalible. El miedo paraliza, el miedo mata.
El miedo es aún peor que la angustia, estruja el corazón, lo retuerce y causa el dolor más isoportable que puedas imaginar. El miedo corta la respiración, altera el pulso, provoca temblores.
El miedo se expande a una velocidad de vértigo. El miedo crece en el interior de una mente, que puede contagiarlo o guardarlo.
El miedo ataca en la oscuridad, suele huír a la luz del día.
El miedo no puede prevenirse ni destruirse, todos le tememos a algo, ya sea a la muerte, a la vida, al fracaso... El miedo afecta a todos, desde los más pequeños hasta los más grandes.
El miedo puede ser manipulado por los demás, puede usarse como arma. Pero pocos pueden controlar al miedo, pocos pueden enfrentarlo, para eso se necesita un gran valor. Y se dice que el valor no es la ausencia del miedo, sino el conocimiento de que hay algo más importante.
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